"No es Unión. Queremos agradecerle a la gente que vino y pedirle disculpas por el resultado. No es el Unión que queremos como cuerpo técnico, y los jugadores tampoco. Aun ganando no estaba conforme. Tuvimos picos muy bajos de rendimientos, fue el partido más flojo que me tocó dirigir a Unión. Pero cada vez los quiero más a los jugadores, cada vez los aprecio más y cada vez me gusta más Unión", analizó.
Igual, el estratega buscó poner paños fríos y pensar en el próximo compromiso: "Viene un rival durísimo y que juega muy bien como Talleres. La gente no se tiene que comer ningún cuento, Unión tuvo picos muy bajos desde el técnico hasta los jugadores, y nos terminó ganando bien Sarmiento. La autocrítica la vamos a hacer tranquilos en la semana. No murió nadie, duele, pero hay que tener tranquilidad. Hay que hablar poco, estar en silencio, y trabajar mucho".
Madelón consideró que lo sucedido en cancha no pasó por "falta de actitud, sino de entender el juego de la segunda pelota". Y se lamentó: "Nos pasó todo el partido, lo habíamos entrenado pero no salió. Hay cosas que no se explican, saludos a la gente de Unión y ojalá el domingo (contra Talleres) paguemos".
