Además, no tuvo inconvenientes en asegurar que tanto él como Lucas Martínez Quarta no tuvieron la culpa de lo que pasó. "Estoy convencido que fue una contaminación y nos comimos siete meses duros afuera de las canchas. Creo que se trató de una injusticia. Ahora hay que salir adelante y disfrutar de salir a la cancha". También agradeció a toda la gente por el apoyo incondicional: "Lo hemos pasado con mucha grandeza gracias al apoyo de los compañeros de la familia, las novias de cada uno y todos los seres queridos que estuvieron con nosotros".
Por último, contó que espera con ansias el momento que le toque jugar para demostrar que no perdió el nivel que venía teniendo hasta que ocurrió esto. "Ahora tengo la ilusión de poder volver a competir por un puesto, de poder volver a ser útil para el equipo y disfrutar de estar acá. En este tiempo me di cuenta lo grande que es este club. Quiero demostrar que estoy en buen nivel", cerró.