En el duelo más esperado de la 23ra fecha, no convirtieron ni Gonzalo Higuaín ni Paulo Dybala (reemplazado poco antes del final) ni Mauro Icardi. El único tanto fue obra del colombiano Juan Guillermo Cuadrado, quien estampó un fuerte derechazo sobre la finalización de la primera etapa.
Ante la presencia del técnico del seleccionado argentino Edgardo Bauza, a medida que fue transcurriendo el desarrollo de uno de los clásicos más tradicionales del norte italiano, Inter intensificó la presión en búsqueda del empate y Juventus intentó responde a través del contraataque, señala Canchallena.
En medio de esa presión final del conjunto de Milán los jugadores del Inter reclamaron por un penal cuando a Icardi lo tomaron de la camiseta y enseguida lo soltaron ante la llegada de un centro al corazón del área. Por el tumulto en la protesta se fue expulsado el croata Ivan Perisic.
Y una vez que concluyó el clásico, Icardi fue el más vehemente en sus reclamos ante el juez del partido, mientras que Higuaín, Dybala y compañía se acercaron hasta las tribunas para celebrar con su público una victoria que, por la rivalidad histórica, vale mucho más que los tres puntos que hubo en juego.
