Lejos estuvieron de alcanzarlos en cuanto a cantidad de goles los otros campeones de la Copa. El Boca de Julio Falcioni fue el ganador del trofeo con menor cantidad de conquistas: marcó ocho en seis partidos y debió superar tres definiciones por penales para avanzar. Arsenal, ganador en la edición 2012-2013, convirtió en once oportunidades y debió atravesar los remates desde los doce pasos ante All Boys, en Semifinales. Huracán, que se llevó la competencia en la temporada 2013-2014, hizo nueve tantos.
La escasa cantidad de goles en contra también fue un punto destacable en las campañas de Boca y River. Al conjunto xeneize sólo le marcaron un tanto: se lo hizo Nicolas Bertocchi, de Defensa y Justicia, en Cuartos de Final. Al Millonario, el único equipo que le anotó fue Estudiantes de San Luis, por los 16avos: le anotó el defensor Marcelo Mosset. Al equipo de Julio Falcioni y al de Néstor Apuzzo le habían marcado en cinco ocasiones, y al de Gustavo Alfaro en dos.
Campeones con contundencia y con una fortaleza defensiva que los transformó en candidatos y los volvió ganadores de la Copa. El Boca versión 2014-2015 y el River 2015-2016 cimentaron su sueño a partir de dos bases: marcar mucho y que le conviertan poco. Así, supieron levantar un trofeo que buscaron todos los equipos del país.