Sin embargo, fue el local quien arrancó mejor, y ya al minuto Papaleo había intervenido para defender su arco. Pero con el paso del tiempo los de Tandil se fueron adueñando del encuentro y al ver que la Gloria se atrasaba en el campo, la visita se animó a más.
Barrionuevo avisó con un cabezazo a los 10, y después Castro definió apenas al lado del palo de Garavano. Chávez también tuvo su chance pero el gol llegó cerca del final de la etapa inicial. A los 39 minutos Barrionuevo se hizo cargo de un tiro libre y con una pegada exquisita marcó el 1-0.
El Albirrojo fue la nada misma en ese primer tiempo. Sin ataque, sin proyecciones y con los mismos problemas defensivos que arrastra desde el inicio.
Para el complemento, Delfino mandó a la cancha a Mainero y Gotti, dos pibes que le cambiaron la cara al equipo, sobre todo desde lo anímico. A los 4 minutos Gotti recibió una habilitación de Rosales y empujó la pelota para convertir el empate.
A los 22´ apareció, otra vez, Gotti. El Tanque recibió un pase bárbaro de Rosales, se la picó a Papaleo y lo dio vuelta. Pero el festejo duró apenas unos minutos porque, en una pelota parada, Gogna sorprendió en el área para cabecear solo e igualar el marcador.
A partir de ahí y hasta el final, Santamarina neutralizó los intentos del local, quien atacaba con más ganas que ideas y quien volvió a dejar una pobre imagen dentro de la cancha.
El último pitazo se perdió entre los silbidos, la reprobación y los insultos que bajaron desde los cuatro costados del Monumental. Y es que el DT no encuentra el equipo y el Albirrojo sigue sin rumbo mientras la zona del descenso parece amenazar cada día un poco más.
