En un partido que empezó muy peleado, la principal virtud del tenista argentino fue la paciencia. Trabajó mucho el partido ante el norteamericano Jack Sock, que alternó buenas y malas. Sin dudas, la madurez de Del Potro para leer los partidos casi tan importante como su saque y su derecha.
El primer set fue un intercambio de golpes, en dónde Delpo pudo quebrar al final para llevarse el parcial por 7-5. En el segundo set, la cosa arrancó mejor: el argentino quebró en el primer game y el partido desde ahí se hizo mucho mas controlable. Al final, se llevó el segundo set por 6-1.
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El último título de Del Potro había sido en Sydney en 2014. Ahora, el futuro del tandilense estará enfocado en la final de la Copa Davis ante Croacia. Sin dudas que el argentino llegá con mucha confianza ya que cada día juega mejor. Y qué mejor que con un campeonato bajo el brazo.
