En el Arena Futuro de Rí, los daneses tomaron la iniciativa a partir del minuto 28 de la primera parte, cuando con el marcador 14-14 lograron un parcial de 3-0 que les dio una ventaja que supieron conservar hasta el final. La estrella danesa Mikkel Hansen, considerado uno de los mejores del mundo y que jugaba contra muchos de sus compañeros en el París SG, fue el mejor de la final con ocho goles.
Los nórdicos ponen fin así a una de las mejores rachas en la historia de los deportes de equipo, ya que la selección francesa, conocida en su país como 'Les Experts', habían ganado las últimas ocho finales de torneos internacionales en las que habían participado (dos en Juegos Olímpicos, tres en mundiales y otras tantas en Europeos).
Los daneses tenían como mejor resultado hasta ahora un cuarto puesto en Los Angeles 1984. El bronce se lo llevó Alemania, que derrotó a Polonia por 31-35.