El arquero del Santo lamentó las jugadas similares con la que el Kiwi lastimó en la noche del lunes. "Nos hicieron un gol de pelota parada y previo al gol nos habían pegado un tiro en el palo. Son cosas que tenemos que corregir. Lamentablemente en Primera División una pega en el palo y otra es gol. Con esos pequeños detalles nos ganaron este partido", señaló en diálogo con Ovación.
También expresó su fastidio por sufrir una nueva conquista en el campeonato con una receta que vienen sufriendo desde inicio de temporada. "Me voy caliente porque perdimos un partido por detalles y por otra pelota parada. No sé cuántos goles así nos han hecho. No es cuestión de un jugador, nos han cabeceado a todos. Lo trabajamos en la semana, pero evidentemente todavía no nos alcanza", se lamentó el uno.
Bértoli también remarcó que el equipo intentó reaccionar en la segunda mitad. No bajó los brazos, fue a buscar evitar el tropezón, pero no tuvieron claridad para agredir al dueño de casa. "En el primer tiempo intentamos, pero equivocamos los caminos. Tuvimos un par de situaciones en la que llegamos adentro del área y jugando por abajo, pero tomamos malas decisiones que tal vez con otras hubiéramos convertido algún gol. Desde el lado anímico estoy tranquilo porque tuvimos reacción. Tenemos que corregir errores posicionales, técnicos y otras cosas más para ganar de visitante, que es lo que queremos", aspiró.
En la segunda mitad del encuentro Patronato abusó del pelotazo. Bértoli indicó que en cierto modo el rival los llevó a utilizar ese recurso. A su vez reconoció que no encontraron claridad para asistir a los hombres más adelantados. "Por momentos intentamos jugar por abajo, pero nos cerraron bien los caminos. Después con los dos hombre de área y ellos cerrados atrás se hizo difícil triangular, no había muchos espacios y nosotros con pocos jugadores en el medio el camino más rápido para llegar al área fue el pelotazo.
Fue un mal partido y cuando jugás mal es difícil ganar", reiteró. Deuda. A Patronato le cuesta horrores sumar cuando sale de la Comarca Rojinegra. En Primera División no pudo ganar en condición de visitante. En esa condición solamente rescató dos unidades de las 21 que asumió. El último festejo fuera del Grella fue el 3 de octubre pasado, ocasión en la que derrotó a Ramón Santamarina, en Tandil. Pasaron una docena de encuentros desde ese recuerdo.
El Seba dio su explicación de porqué el rendimiento del equipo difiere de acuerdo a los escenarios donde asume cada historia. "Los rivales también juegan distinto y tienen otra predisposición en el Grella. En Junín intentamos, pero no nos salieron las cosas. Ahora tenemos dos partidos más para seguir sumando. Ese es el objetivo que tenemos y todavía nos quedan seis puntos", recordó.
