El 'Tano' soltó su fastidio por el nuevo modelo y aseguró: "No me gusta enterarme por los diarios". Y también manifestó: "Me enojé porque soy el Presidente, me tendrían que haber pedido permiso para usar la camiseta negra". Además, volvió a elogiar a Ábila
El Presidente de Boca, Daniel Angelici, expresó que el Xeneize no va a utilizar la camiseta negra y ha despertado una gran polémica con la empresa Nike, que es la que empresa que viste al conjunto de la Ribera. "Me enojé porque soy el Presidente, me tienen que pedir permiso para usar la camiseta negra", soltó el Tano.
Y además, el mandatario manifestó: "No se va a usar la camiseta negra, no me gusta enterarme por los diarios". Con esto, una nueva polémica ha aparecido en Boca con respecto al modelo, debido a que cuando salió la camiseta rosa generó un gran rechazo y algo similar con la indumentaria color flúo. En ambos casos, los colores llamativos dieron lugar a partidos por la última fecha ante Gimnasia y Esgrima La Plata, con el Xeneize no disputando el campeonato.
Así, el máximo dirigente tendrá que respaldar lo dicho y llegar a un acuerdo con la empresa, debido a que los últimos modelos que se alejaron del tradicional azul y amarillo tienen la intención de buscar un rumbo diferente como sucede con el Barcelona (al que también viste la misma empresa), que ha usado naranja, amarillo, verde, celeste, negro, entre otros.
En tanto, en el fútbol argentino no es la primera vez, porque River en su momento también tuvo polémica con una negra conmemorando los 75 años del Monumental; San Lorenzo tuvo una dorada que nunca se llegó a utilizar porque Matías Lammens argumentó que 'no tenía nada que ver con la historia del club'. Así, Boca vuelve a abrir el debate sobre las camisetas de colores que no tienen que ver con la historia del club (al menos en este modelo).
Además del tema de la indumentaria, también le preguntaron por 'Wanchope', a quien no podrían contratar hasta junio, ya que por haber jugado la fase previa en Huracán no podría reforzar el plante de Guillermo para alzar la soñada séptima. "Claro que me gusta", sostuvo sin vueltas.
