Mencionó que tras 35 años de carrera, al jubilarse, decidió poner en práctica su hobby y empezar a coleccionar estampillas. Las he conseguido, o comprado, detalló y agregó que de la parte nacional, he tratado de conseguir casi todas.
A raíz de mi propio oficio, nace todo. Llegue a un determinado momento de mi profesión sin ser filateista. No podía serlo por la reglamentación. La estampilla por lo general se desprende de su sobre o se puede sacar. Incluso yo fui Inspector de correo, donde controlaba todo eso, aseveró.
Bruno contó que formó parte del Centro de Filatélicos de la ciudad de Campana.
Ahora estoy tratando de venderlas, hay mucha gente interesada. Las hemos escaneado y las puesto en conocimiento para quiénes tengan interés, dijo. Elonce.com